ELSE LASKER-SCHÜLER
Escritora alemana nacida en Elberfeld, educada en el seno de una familia de la alta burguesía judía, contrajo matrimonio en 1894 con el médico Berthold Lasker, y se trasladó con él a Berlín. Su matrimonio duró tan sólo cinco años, pero la ciudad de Berlín encendió el talento artístico de la escritora, que frecuentó allí algunos círculos bohemios, en torno a Julius Hart, E. Mühsam y P. Hille. En 1903 contrajo nuevamente matrimonio, esta vez con H. Walden, que más tarde sería redactor de la revista "Der Sturm" (La tormenta), a la par que trabó amistad con numerosos artistas, entre los que se contaban Oskar Kokoschka, Franz Marc y K. Kraus, quien apoyó siempre el trabajo de Lasker-Schüler tras su separación del segundo marido.
En 1933 emigró a Suiza y realizó dos viajes a Palestina, en 1934 y 1937, respectivamente.
Su prosa temprana,
Las noches de Tino de Bagdad (1907), la novela epistolar
Mi corazón (1912) sobre la bohemia berlinesa y su historia imperial.
El malik (1919), una serie de cartas ficticias escritas a Franz Marc, caído en la guerra, recuerdan en mucho algunos tonos de la literatura oriental, de lo cual dan buena muestra también los dibujos y las ilustraciones que acompañan los textos, pues la escritora sentía una gran atracción por las fuentes orientales, cristianas y judías. La lírica de Else Lasker-Schüler, sin duda una de las más significativas poetisas en lengua alemana, preparó el terreno del expresionismo. Sus composiciones poéticas encierran una metafórica rica y desacostumbrada, que en forma evocadora o elegíaca recoge sentimientos como el amor, la tristeza o la penosa existencia del pueblo judío, una temática esta última que se repite en las
Baladas hebreas (1913) que, sin lugar a dudas, contribuyeron de manera decisiva a fomentar su fama como escritora judía. El tema de la persecución de los judíos es también el tema central de
Arturo Aronymus y sus padres (1932), que, junto con
Los Wupper (1910) y
Yoyyo (1980), editada póstumamente, conforma el total de su producción teatral. Sus últimas obras están profundamente marcadas por las tradiciones judías y la religiosidad, así como por la soledad del exilio.
Su obra fue incluida por los nacionalsocialistas en el índice de libros prohibidos y fue desnaturalizada en 1938. En 1939 se trasladó definitivamente a Palestina, donde falleció en Jerusalén en 1945. ©
epdlp